Another World

Katanas

Hoy quiero hablar de una de mis grades pasiones… las espadas.

Es casi inexplicable  mi fascinación por estas piezas de metal, pero en concreto hablaré hoy de las Katanas.  Comúnmente se conoce a las Katanas como espadas japonesas, siendo mas un sable que una espada, su origen se remonta a los siglos X-XII, cuando los chinos de la dinastía Song introdujeron en el país una espada curva llamada «El destripador de caballos» , nombre dado por ser un arma utilizada en combate contra la caballería pesada para destripar el vientre o atacar los cuartos delanteros del caballo. Esta espada curva, más adelante conocida como sable, simplemente evolucionó hasta la posterior katana japonesa.

Las espadas japonesas y otras  armas cortantes eran fabricadas mediante un elaborado método de calentamiento reiterado, plegando y uniendo el metal. Esta práctica se originó debido al uso de metales altamente impuros.

La curvatura distintiva de la katana se debe, en parte, al trato diferencial durante el calentamiento al que es sometida. Al contrario que gran parte de las espadas producidas en otros lugares, los maestros herreros japoneses no endurecen el sable completo; solamente el lado que posee filo. El proceso de endurecimiento hace que la punta del sable se contraiga menos que el acero sin tratar cuando se enfría, algo que ayuda al herrero a establecer la curvatura del sable. La combinación de un lado duro y un lado tenaz de la katana y de otros sables japoneses es la causa de su resistencia a pesar de retener un buen filo cortante.

El acero que se utilizaba (y se sigue utilizando) es el tamahagane, el cual se rompe y con los fragmentos se forma un ladrillo rectangular, que se envuelve en papel de arroz y arcilla líquida para evitar la oxidación una vez se comience a calentar. Cuando se alcanza la temperatura de caldeo se golpea para que se una y forme un ladrillo unido.

El ladrillo es vuelto a calentar y se golpea con el martillo (durante este proceso y el anterior, el herrero que sujeta el bloque golpea con un martillo y es ayudado por uno o dos ayudantes que usan grandes mazas con dos manos), haciéndolo más fino y alargado. Cuando ha alcanzado el doble de su longitud original se realiza una incisión justo en el medio y se dobla sobre sí mismo hasta obtener exactamente el mismo ladrillo original, pero con dos capas de acero entre sí.

Este método de doblar el acero sobre sí mismo se repite como mínimo 12 veces, obteniendo un ladrillo de acero de la misma longitud del original, pero con una cantidad de capas de acero de entre 256 y 4.096, unidas entre sí.

Así pues, el ladrillo que se consigue tiene una cantidad muy baja de carbono (menos de un 0,5%) gracias a este doblaje. Este acero es bastante flexible, lo cual sirve para absorber golpes y aumentar la durabilidad en combate, pero es posible que no sea lo suficientemente duro para obtener un buen filo. El filo de una katana debe ser muy duro, de modo que se recurre a la segunda característica de éstas: utilizar dos aceros para la misma hoja.

Suficiente de historia, les dejare unas imágenes y unos vídeos impresionantes.

Como de película.

Prometo actualizar con fotos de mi coleccion privada

Simplemente impresionantes

Deja un comentario